Los procesos de mantenimiento web son fundamentales para que nuestro ecommerce tenga una buena acogida y motive la compra.
Solo a través de tareas de mantenimiento como el control de los elementos o productos, la estructura, usabilidad, etc. podremos determinar el grado de satisfacción de los usuarios al navegar en nuestro sitio.
Por tanto, estas acciones nos permiten detectar cualquier error que esté minando nuestro rendimiento comercial.